El eternamente joven y siempre elegante Vladimir el vampiro inmortal, no ha podido encontrar una novia durante trescientos años. Ha intimidado, secuestrado y convertido a varias princesas en ranas, pero eso no ha facilitado el cortejo para el príncipe de las tinieblas. Mientras tanto, todo lo que la bella doncella Bárbara la Valiente hace es luchar contra los posibles pretendientes en la arena, pretendientes que solo codician su dote. Pero el Rey Lenteja descubrió cómo llegar a Barbara y es también el punto débil de Vladimir. Aunque olvidó tener una cosa en cuenta: a pesar de que tiene la vida y el corazón de Vladimir en sus manos, todavía hay espacio en su corazón para que el amor cobre vida.